Por todo el mundo, varias naciones han hecho progreso hacia la igualdad racial durante el siglo 20. Hace cincuenta años, en julio de 1964, los Estados Unidos de Norteamérica pasó su propia Carta de Derechos Civiles—el resultado, por lo menos en parte, de las elocuentes y persuasivas palabras, así como por las acciones de un hombre.